La planta de Naval Group ubicada en Lorient, Francia se
especializa en el diseño y construcción de buques de guerra de entre 1.000 y
8.000 toneladas de desplazamiento.
En ése sitio de construcción e ingeniería naval que fabricó buques gemelos para la Armada de Francia y Egipto ya comenzaron los aprestos de un proceso que culminará en 2023 cuando se entregue el último de los tres OPV (sigla inglesa de Ocean Patrol Vessel, traducido nave de patrullado oceánico) a la Armada Argentina.
En ése sitio de construcción e ingeniería naval que fabricó buques gemelos para la Armada de Francia y Egipto ya comenzaron los aprestos de un proceso que culminará en 2023 cuando se entregue el último de los tres OPV (sigla inglesa de Ocean Patrol Vessel, traducido nave de patrullado oceánico) a la Armada Argentina.
El Ministerio de Defensa informó que el jefe de la Armada, almirante
José Luis Villán, visitó la base naval de Toulon, Francia, para interiorizarse
sobre el avance del alistamiento y los trabajos de adaptación del buque
patrullero OPV L´Adroit y de la construcción de los otros patrulleros oceánicos
que se incorporarán a la fuerza tras la firma del contrato entre la República
Argentina y la empresa Naval Group.
Villán y al jefe de la Misión Naval en Europa, capitán de
navío Marcelo Ángel Valverde, fueron recibidos por el vicepresidente para
Latinoamérica, Olivier Michel; el jefe de la División Unidades de Superficie y
el jefe del Proyecto Armada Argentina – L´Adroit y autoridades pertenecientes a
la empresa responsable del alistamiento y construcción de los buques.
Durante la visita, se les expusieron los avances de las
obras en el OPV L´Adroit y en los OPV N°2 y N°3, cuya construcción ya fue
iniciada en los astilleros franceses de Piriou, en la localidad de Concarneau,
y de Kership Lanester, en la ciudad de Lorient, respectivamente.
La Armada busca con la incorporación de buques del tipo OPV,
satisfacer las necesidades de control de espacios marítimos bajo
responsabilidad de la fuerza ya que actualmente esta tarea la protagoniza de
forma más activa y visible la Prefectura Naval Argentina, fuerza que posee
equipamiento mucho más moderno y acorde a estas funciones, quedando las tareas
realizadas en este sentido por la Armada en segundo plano, fundamentalmente por
dos razones. Una es la obsolescencia y antigüedad de algunos medios empleados y
la otra es la utilización de buques meramente de guerra para estas tareas.
Analizando las funciones contempladas por la Armada para los
OPV, la cuales serian realizar patrullaje en zonas costeras, control marítimo
de pesca ilegal dentro del Mar Argentino, servicios SAR (salvamento y rescate),
apoyo a la comunidad ante desastres naturales, logística y transporte de tropas
especiales, funciones de infiltración y lucha contra el narcotráfico.
Estas funciones contemplan que los buques no requieran de
armamento y equipamiento especial para desempeñar dichas tareas dentro de un
teatro de operaciones el cual no es un teatro de guerra de alta o media
intensidad, respondiendo a la tendencia mundial, esta clase de embarcaciones vienen
equipadas con armamento básico lo suficientemente efectivo para brindarles un
poder de fuego acorde a las funciones para lo que están destinadas, no
necesitando electrónica sofisticada, ni tampoco armamento de gran calibre.
Las cuatro embarcaciones serán bautizadas :
-ARA Bouchard
-ARA Piedrabuena
-ARA Almirante Storni
-ARA Bartolomé Cordero
Misiones para el control de la pesca ilegal
La presión pesquera ilegal más grande se concentra en “la
milla 201”, en intersección de la ZEE argentina y las aguas controladas por
Londres en derredor de las Malvinas donde año a año entre febrero y marzo llega
más de un centenar de “poteros” extranjeros (pesqueros especializados en el
cefalópodo) a pescar calamar. Estimaciones de la Subsecretaría de Pesca basadas
en distintas fuentes entre ellas el Instituto Nacional de investigaciones
Pesqueras (Inidep) hablan de una pérdida anual de entre 200 y 800 millones de
dólares por la pesca furtiva.
El número animó al alto mando naval a evaluar la
modernización de las tres veteranas corbetas francesas A-69 que integran la
División de Patrullado Marítimo con asiento en Mar del Plata. Con poco dinero
podría actualizarse la planta motriz, los sensores y mejorar las condiciones
marineras del casco, refirieron fuentes navales.
La recorrida finalizó a bordo del OPV L´Adroit, donde la
comitiva naval argentina supervisó los trabajos de modernización y adaptación
del buque, que fue previamente operado por la Armada francesa.
Durante su viaje a Francia, el jefe de la Armada, almirante Villán
también visitó la ciudad de Bormes Les Mimosas, donde nació el prócer
franco-argentino Hipólito Bouchard, que sirvió en la Armada Argentina y
peruana, y participó de los eventos realizados en honor al héroe naval, quien combatió a
órdenes del Almirante Guillermo Brown en la guerra por la Independencia y
realizó la expedición corsaria a bordo de la fragata La Argentina, entre 1817 y
1819.
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